Maite Ruiz Aquerreta. Psicóloga, Mediadora y Socia de Mediación Navarra
No todo el mundo es como yo.
Hay muchos elementos que hacen de nosotr@s personas diferentes: dónde hemos nacido, cómo nos han educado, qué experiencias hemos vivido, etc. Todo esto hace de nosotr@s personas muy diferentes. La diferencia no tiene por qué generar dificultad en la convivencia, pero lo cierto es que a menudo tenemos que relacionarnos con personas que no nos ponen fácil la relación ni la comunicación.
Si queremos definir que es una persona difícil, a mi se me ocurre que es aquella con la que la relación y la comunicación supone un reto, pero también es aquella que posee un lado bueno, aunque no lo conozcamos todavía.
Las personas difíciles, son aquellas que tienen comportamientos como señales de que no nos lo van a poner fácil como, por ejemplo:
• Discuten por todo, porque siempre se quieren tener razón
• No ven el lado positivo de las cosas
• Critican sin pedir tu opinión
• Interrumpen las conversaciones. Carecen de habilidades comunicativas
• Se molestan cuando las cosas no suceden como quieren
• No prestan atención cuando alguien les habla
• Dirigen la atención hacia ellos: egocéntricos
• Etc…
Cualquiera de nosotros podemos ser así en un momento dado… Pero cuando alguien es así de manera casi permanente, es cuando estamos ante una persona difícil. No nos lo va a poner fácil, pero si estamos en un entorno de trabajo tenemos que convivir. Y más que eso, trabajar juntos y colaborar. Para lograrlo hay que mantener esa relación y esto puede convertirse en un auténtico desafío.
Pues bien, el conocimiento de algunas sencillas herramientas de comunicación nos sirve para mantener esas relaciones sin que nos haga lamentarnos y sufrir.
El primer paso es revisar el concepto que tenemos de persona difícil. ¿Solo porque es diferente a mí, es difícil? ¿Qué conductas lleva a cabo para que la tache como difícil?
¿Puedo hacer el esfuerzo de no etiquetarle como difícil, sino conocerle y aprender la mejor manera de tratarle?
Si tu respuesta a esta última cuestión es sí, esta sesión sobre COMUNICACIÓN CON PERSONAS DIFICILES puede serte muy útil. En ella verás los diferentes tipos de personas difíciles en función de sus comportamientos y aprenderás a adaptar tus respuestas para que tanto la relación como la comunicación permitan el trabajo conjunto.
Conocerás qué herramientas de comunicación pueden servirte y como ponerlas en práctica en tu relación con los demás.
Eso sí, no olvides que ser diferentes no implica dificultad y si encuentras a la mayoría de las personas difíciles, tal vez el problema está en ti.
Olvida cambiar al otro, mejor adáptate tú
Comunicación con personas difíciles es el 4º taller de Comunicación interna impartido desde Liderazgo Participativo y financiado por el Gobierno de Navarra a través de su programa de sensibilización en Economía social.
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